La primera carrera de Formula 1 del año comenzó accidentada.
Las fuertes lluvias que caían mientras se celebraba el Gran Premio de Australia provocaron que pilotos experimentados como Carlos Sainz, Max Verstappen y Oscar Piastri sufrieran despistes o choques.
El australiano Jack Doohan, que patinó sobre la pista mojada, impactó su Alpine contra una pared y tuvo que abandonar la competencia antes de completar la primera vuelta..